La Calabaza

La Calabaza

08 junio 2013

Orondo y Redondo!!!

Es maravilloso ver como los chicos juegan con la geometría sagrada, sin tanto acartonamiento!
Las imágenes que van a ver, pertenecen al Taller de Geometría Sagrada para chicos, que titulé: 
¡Redondo y Orondo!



Hablarles de sólidos platónicos, espirales áureas, en medio de laberintos y siglos de historia, fué un juego más!
Aquí, grandes y chicos, dibujan el Laberinto de Creta

Me cuentan que ahora, los chicos aprenden geometría recién a partir de 5º Grado; una lástima!
Este nene que ven aquí, no tendrá más de 7 u 8 años, sin embargo siendo la primera vez que sostenía un compás, miren que bella Semilla de la Vida que logró!


Aqui comenzó a pintarla por el centro, con el color adecuado.


Aquí el progreso


Y el trabajo terminado!


Gracias "Casita Juana Azurduy" - Cosquín, Córdoba, Argentina

01 junio 2013

El Ajo y sus propiedades


El ajo crudo tiene propiedades antisépticas, fungicidas, bactericidas y depurativas. 
Las excelentes cualidades diuréticas son también ampliamente conocidas. 
Por todo esto, el ajo se ha utilizado desde la antigüedad para tratar diversas afecciones. Las propiedades beneficiosas del ajo son tales que incluso se ha llegado a hablar de propiedades anti cancerígenas en muchos estudios recientes.
También son conocidas sus propiedades anti bacterianas ya que ayuda a combatir un gran número de bacterias, virus y hongos. Esta acción anti bacteriana del ajo es debida a la alicina. 
La alicina, además de incrementar las defensas del organismo, también es útil para preservar la inocuidad de otros alimentos o de comidas específicas.
Cómo usarlo para infecciones.
Frotado en la piel, transfiere el aceite de ajo crudo directamente en el torrente sanguíneo. El ajo crudo es un antibiótico natural que no lleva la mala flora que un antibiótico ordinario puede alojar en los intestinos.
- Aplicar en los pies y poner calcetines (usar viejos).
- Frota el pecho para resfriados, neumonía o frotar en las fosas nasales para las infecciones sinusales.
- Poner en un hisopo de algodón para las infecciones del oído.
- Aplicar directamente sobre las aftas en la boca.
- Frotar en el pie de atleta o el área genital por la tiña inguinal.
- Insertar en el área afectada por hongos u otras infecciones relacionadas.
- Aplicar sobre erupciones en cualquier lugar.
- Este aceite de ajo mata la Candida, parásitos, malas bacterias y virus mediante la aplicación directa.
Además, trata infecciones sistémicas por absorción a través de la piel en el suministro de sangre y viaja por todo el cuerpo. Este remedio natural realmente funciona, sólo tienes que aceptar las condiciones de su olor. Trata de usar ropa exclusivamente para este tratamiento y no la combines con otra al lavarla. Después de dos semanas, hacer un nuevo lote de este ungüento.
Cómo hacer un Ungüento con Ajo para infecciones.
hermandadblanca.org   ajos 3 580x195 Propiedades anti bacterianas del Ajo y cómo hacer un ungüento para Infecciones plantas medicinales rincon salud rincon salud  plantas medicinales El rincon de la salud    description multimedia
- 3 cucharadas aceite de coco virgen
- 3 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
- 3 cucharadas de ajo fresco, picado
Si el aceite de coco no es líquido, se tiene que calentar (a baño maría) hasta que se derrita. A continuación, agregarás tres cucharadas de aceite de oliva y mezclar juntos. Luego agrega tres cucharadas de ajo picado fresco. Puedes moler el ajo en la licuadora con un poco de la mezcla de los aceites, añadir el resto del aceite y mezcla a alta velocidad durante dos minutos. Otra sugerencia es usar un molinillo de café. Vierte la mezcla por un tamiz para eliminar trozos de ajo que la licuadora puede haber pasado por alto. Vierte la mezcla en un frasco de boca ancha y etiquetarlo “Ungüento de ajo” Meter en el refrigerador.
Recién hecho, la mezcla es de un color lechoso. Luego se convierte en una pasta suave y espesa después de una hora. Después de estar en el refrigerador durante varias horas, se pone un poco denso, como un bálsamo fácil de untar.
No te preocupes si tu preparado se derrite. Los aceites no están densos cuando se calientan. Puedes usarlo como aceite o puedes ponerlo de nuevo en el refrigerador y enfriar de nuevo.
Fuente: http://ciudadesplanetarias.com/propiedades-anti-bacterianas-del-ajo-y-como-hacer-un-unguento-para-infecciones/

Trigo, Avena, Cebada y Centeno, no para todos...

La enfermedad celíaca es la intolerancia alimentaria de orden genético más frecuente en la especie humana.   
Una lesión en el intestino delgado, hace que algunas personas genéticamente predispuestas, no toleren la ingesta del gluten de trigo, cebada, centeno y probablemente avena.
Es común a todas las culturas pero, se ve con mayor frecuencia en los pueblos que consumen básicamente trigo. Esto es Europa y los territorios que fueron sus dominios coloniales y culturales.
Es menos frecuente en Asia, cuyo alimento base es el arroz y en los pueblos de América precolombina, cuya alimentación se basó en la papa, la mandioca y el maíz.
Afecta más a las mujeres que a los hombres y hoy se sabe que 1 de cada 79 niños son celíacos.

Síntomas

Varían ampliamente en los distintos pacientes y en las distintas edades de la vida.
Los niños presentan frecuentemente: fatiga, pérdida de peso, nauseas, vómitos, diarrea, distención abdominal, meteorismo y anemia.
sin embargo, tanto en niños como en adultos, los síntomas pueden ser atípicos o estar ausentes, dificultando el diagnóstico.

Los más expuestos

Son poblaciones de riesgo de padecer la enfermedad, los familiares de personas celíacas, los que padecen enfermedades autoinmunes (diabetes miellitus, tiroiditis, hepatitis autoinmune, etc.) y las personas con síndrome de Down en quienes la prevalencia es mayor.

Diagnóstico y Tratamiento.

Necesita de alta sospecha clínica, determinación de anticuerpos de alta sensibilidad y especificidad en una muestra de sangre y la confirmación en una biopsia de intestino delgado..

Su tratamiento consiste en una dieta estricta y permanentemente libre de trigo, avena, cebada y centeno. (Sin TACC)

Fuente: Revista Convivimos.
             Dr. Eduardo Cueto Rúa